jueves, 3 de marzo de 2011

* * *JAQUE AL EMPERADOR* * *

Amigos: 
      Resulta  que  siempre  que  leo  un  libro  desearía  conocer  al  autor  y  preguntarle  por  qué  escogió  aquel  protagonista,  cómo  concibió  el  argumento,  la  razón  de  tal  o  cual  escena…  y  cualquier  otra  duda  que  se  me  pudiera  presentar.
     Pues  bien,  hoy  os  explicaré  cómo  nació  Jaque  al  Emperador,  mi  primera  novela  publicada.
     La  historia  surgió  hace  varios  años cuando  visité  el  museo  del  Hermitage  en  San  Petersburgo,  y  de repente,  sin  que  tuviera  nada  que  ver  con  el  lugar,  pensé  en  el  archiduque  Rudolf ,  hijo  del  emperador  Franz  Josef  y  de  la  emperatriz  Elisabeth,  heredero  del  trono  Austrohúngaro,  que  murió  de  manera  incomprensible  en  el  pabellón  de  caza  de  Mayerling.  Supongo  que  el  antiguo  palacio  de  invierno  del  Zar  de  Todas  las  Rusias  me  inspiró  aquel  recuerdo.
    De  regreso  a  Barcelona,  me  puse  a  trabajar  en  la  obra.  Busqué  bibliografía,  pero  por  desgracia  en  español  solo  existía,  a  parte  de  aquellos  libros  que  hacen  referencia  a  la  historia  de  toda  la  dinastía,  una  novela  de  Néstor  Luján  titulada  “En  Mayerling  una  Noche”,  que  incide  en  la  versión  oficial  de  los  hechos,  aunque  expone  ciertas  dudas.
     Para  empezar  era  todo  lo  que  tenía.
     Al  principio  me  desanimé,  y  mientras  me  preguntaba,  ¿por  qué  quería  contar  la  historia  de  Rudolf  de  Habsburgo  y  no  la  de  Alfonso  XII,  por  poner  un  ejemplo,  del  que  abundaba    bibliografía  y  además  había  sido  rey?  No  lo  sé,  pero  a  medida  que  crecían  mis  dudas,  más  aumentaban  mis  deseos  de  seguir  adelante.  Tal  vez  se  deba  a  que  siempre  he  defendido  las  causas  perdidas  y,  créanme,  el  archiduque  Rudolf  era  una  causa  perdida  que  despertaba  todas  mis  simpatías,  pues  fue  prisionero  de  su  ideología  liberal  en  una  corte  tan  conservadora  como  la  de  Viena.
     Así  las  cosas,  leí  parte  de  lo  publicado  en  el  extranjero,  hasta  obtener  una  visión  más  real  de  lo  ocurrido.  Recorrí  los  antiguos  territorios  del  imperio,  fui  hasta  el  Archivo  del  Palacio  Real  de  Madrid  que  me  reservaba  una  sorpresa.   Y  aquel  archiduque  de  la  casa  de  Habsburgo,  que  una  día  viajó  a  España  en  el  yate  imperial  y  atracó  en  el  puerto  de  Barcelona;  que  tan  injustamente  había  sido  tratado  por  la  historia,  y  que  tanto  animaba  mi  interés,  acabaría  por  cautivarme.
       Si  tuviera  que  destacar  a  uno  de  los  protagonistas,  por  su  dificultad  en  el  proceso  de  elaboración  de  la  obra,  no  sería  al  príncipe  heredero,  su  conducta  era  la  propia  de  un  rebelde  incorregible,  y  por  tanto,  sus  reacciones  también  eran  previsibles.  Sin embargo  no  puedo  decir  lo  mismo  de  su  padre  el  emperador,  y  seguramente  se  preguntarán  por  qué,  si  era  un  conservador  acérrimo  y  autócrata.  Pues  bien,  tal  vez  en  el  querer  transcribir  correctamente  esta  manera    de  proceder  es  donde  se  esconden  los  inconvenientes  de  la  creación.  Y  la  construcción  de  los  diálogos  entre  padre  e  hijo  me  llevó  horas  de  trabajo,  hasta  conseguir  el  realismo  que  creía  debían  tener.
       Gracias  a  Ediciones  Áltera,  hoy  el  libro  ha  sido  publicado  y  si  estáis  interesados  en  saber  más  de  Rudolf,  a  parte  de  recomendaros  que  lo  leáis, preguntadme  y  os  responderé.
      Saludos 

5 comentarios:

  1. "JAQUE AL EMPERADOR" ES UN LIBRO LLENO DE SENSIBILIDAD Y AL MISMO TIEMPO PRECISIÓN QUE TE LLEVA A UN MUNDO PASADO LLENO DE ENTRESIJOS QUE TE ENGANCHARÁ. OS RECOMIENDO COMPRARLO Y LEERLO. FELIZ DÍA A TODOS.

    ResponderEliminar
  2. Si Rodolfo no hubiera muerto, cual hubiera podido ser el panorama politico al subir al poder substituyendo a su padre,¿habria provocado una revolución en el imperio?, ¿se habria evitado la primera guerra mundial?

    ResponderEliminar
  3. Gracias por defender con tanto entusiasmo mi novela. Es un privilegio tener lectores como estos.
    En relación al segundo comentario, si Rodolfo hubiera subido al trono, se hubiera desligado de Alemania y habría convertido el imperio en una monarquía federal. Probablemente la Gran Guerra no se habría desarrollado tal y como la conocemos hoy.
    Saludos.

    María Bastitz

    ResponderEliminar
  4. jose m. de la ossa22 de agosto de 2011, 9:46

    Aún a riesgo de ser pesado, publico un comentario, aunque ya lo hice con el articulo del mes de abril (sin duda no era el lugar adecuado, pero es el primero que vi).
    Siempre fue motivo de una especial atracción para mi lo acaecido en Mayerling. Forma parte de esos misterios de los que dificilmente se sabrá la verdad y mas aún si se trata de un asunto político, por eso cuando tuve noticias del libro, no dudé en leerlo, pues hay poca bibliografia a mano de los simples lectores publicada en español.
    La doble historia que se va desvelando a la vez da al relato un aire ameno y que engancha facilmente y hace que sea dificil, al menos en mi caso, tener que cesar en la lectura.
    Tambien me ha servido para descubrir este blog, del que sin duda aprenderé a desarrollar este interesante modo de comunicación y de compartir aficiones comunes.

    ResponderEliminar
  5. José M., no me había dado cuenta de tu comentario. Te agradezco tu crítica de mi libro, que es fruto del trabajo de varios años.
    Un cordial saludo

    María Bastitz

    ResponderEliminar